martes, 13 de noviembre de 2012

Solidaridad, Indiferencia o Caridad

Los Medios de Desinformación de la derecha parece que acaban de descubrir la pólvora:
Pregunta: ¿cómo desactivar las reacciones ciudadanas contra su gobierno?
Respuesta: Creando una dicotomía ficticia entre esa reacción legítima y más que justificada contra uno o más valores universalmente bien aceptados.
Por lo visto, da la impresión que esto lo deben enseñar en primero de periodismo en ciertas universidades de idiosincrasia y financiación afines al partido.
Hoy propone La Razón (de la sinrazón que, a mi razón...):
¡¡¡ContraHuelga 14-N!!!
Y de repente, te das cuenta de que la perversión y mezquindad no conoce límites. ¿Cómo una vez más la derecha política que maneja los medios de comunicación pretende manipular la opinión de ciudadanos honrados y sensibles?

1º.- Donar comida no es solidaridad sino caridad o misericordia

2º.- Los sindicatos son el fruto de la solidaridad de la clase trabajadora

Por tanto sí que hace falta más solidaridad, mucha más. Y no el exceso de individualismo que impera en nuestra sociedad moldeada durante décadas de inoculación vía televisión, radio, cine, prensa del sueño americano.
Si fuéramos más solidarios no haría falta aplicar tanta misericordia y caridad. Éste es el último recurso, hay que aplicarlo porque no queda otro. Pero hay que recuperar la solidaridad de la clase obrera. No, no me refiero a los trabajadores de las minas, obreros de la construcción, barrenderos y demás oficios.
Ellos son obreros que realizan trabajos más básicos que otros pero la clase obrera la formamos todos los que vivimos de nuestro trabajo y si nos falta no tenemos recursos para mantener nuestras familias, nuestros hogares.
Clase obrera es el periodista de RTVV, de El País, etc... clase obrera es la azafata de vuelo de Iberia... clase obrera es el funcionario de justicia, de sanidad, de educación, de las administraciones... clase obrera es el artista, el músico, el actor... clase obrera es el profesional autónomo, el pequeño empresario que es el primer trabajador de su empresa, el pequeño comerciante, el arquitecto, el ingeniero, el neurocirujano, el anestesista, el contable...
Puedes tener un buen sueldo o llegar justo a fin de mes pero si te quitan tu trabajo, tarde o temprano dependerás de la misericordia y la caridad.

Pero ellos prefieren distorsionar los términos y llamarle solidaridad porque así ocultan que su partido se está cargando todos los mecanismos de solidaridad de los que se ha dotado nuestra sociedad desde el mismísimo y fundamental concepto de Estado hasta los sistemas de protección social como la Sanidad y la Educación Públicas, los Sistemas de Pensiones Públicas de jubilación, enfermedad, desempleo y por descontado las ayudas al desarrollo de países del tercer mundo.
Quizás es posible que realmente no tengan clara la diferencia entre caridad y solidaridad, entre altruismo y beneficio social. Porque la solidaridad no busca el bien ajeno a toda costa sino que al final reporta un beneficio para la sociedad en la que vivimos que termina repercutiendo en nuestro propio bienestar.
Quizás sí que lo tienen claro pero tanto les da porque entre caridad o solidaridad lo que realmente pretenden que elijas es la indiferencia.

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